Buenos días, amor, hace un rato pensaba en vos ¿sabés? Me preguntaba dónde carajos habrás amanecido y si tu noche habrá sido buena. Yo dormí bien, como suelo dormir bien cuando el día ha sido largo y cansado. Desperté temprano pero me levanté después de que el despertador sonó tres veces, porque hay costumbres más fuertes que mis ganas de saltar al mundo por la mañana.
Espero que tu día empiece bien, que dondequiera que estés la música sea buena, el clima agradable y el café fresco y caliente.