Casi es hora de ir por el café, es decir que ya llegan las 3.
Pensé en vos constantemente en el fin de semana. ¿Qué andarías haciendo por el mundo?
Pensé en más cartas que escribirte, en encontrar formas para convencerte de que ya te estás enamorando de mí. Pero tengo sueño por la tarde, así que por lo pronto, me voy por un café.
Igual, sigo pensando en vos.