Yo debería decirle que

21 enero, 2013 del día

Con usted, señor, me acostaría con los ojos cerrados. Con los ojos abiertos. Con la luz apagada para besarlo en lugares poco ortodoxos y adivinar dónde será el próximo punto en que sus dedos dejarán demorados roces, huellas de la exploración que hará del territorio desconocido de mi piel. Con la luz encendida para verlo a los ojos y acercarme despacio, estirando los segundos antes de sonreír y morderle los labios.